Green Bay superó como local a Seattle 27-17 y es uno de los equipos que
ganó los dos partidos iniciales. Aaron Rodgers lanzó para dos touchdowns,
Russell Wilson tuvo un buen partido pero fue interceptado y Eddie Lacy sufrió
una lesión que lo marginó del juego.
Este duelo ya es un clásico de la
NFC. Los cinco enfrentamientos recientes los ganó Seattle, incluso la final de
conferencia de 2014. Por eso, Green Bay necesitaba un triunfo para demoler
estadísticas y asegurar un futuro prometedor. Ganarle al finalista de los últimos
Súper Bowls requería cierta estrategia porque Seahawks ostenta una defensiva
extraordinaria, a pesar de la derrota sorpresiva en la semana inicial.
Anoche, Packers supo contener
desde la trinchera los avances de Russell Wilson y Marshawn Lynch, quien totalizó
apenas 41 yardas en acarreos. Este factor fue clave, sobre todo en el último
cuarto, ya que el encuentro tuvo tramos desfavorables para los “empacadores” en
el tercer período. Green Bay asumió el control del partido hasta el medio
tiempo, con un par de goles de campo y un touchdown de James Jones, tras el
pase de Rodgers de 29 yardas. Richard Sherman se mareó por las acciones del
quarterback y sus receptores. La falta de Kam Chancellor está demoliendo a la
secundaria y el jugador se niega a presentarse hasta que le renueven el contrato.
El dramatismo se apoderó del
partido en el tercer período, cuando Seahawks lo dio vuelta con dos
anotaciones, una del veterano Fred Jackson (ex Bills) y otra aérea desde Wilson
hacia Doug Baldwin. Seattle perdía 3-13 y pasó a ganarlo por cuatro. El juego
terrestre de Lynch no prospera como antes y Jimmy Graham (TE) está adaptándose
para ofrecerle otro perfil al equipo. Da la impresión de que Wilson está
lanzando más de lo que Lynch corre y ese cambio lo veremos todo el 2015.
La diferencia del duelo llegó
sobre el último cuarto. Packers anotó con un pase a Richard Rodgers y posteriormente
la defensiva se encargó de presionar a Seattle. Jayrone Elliott interceptó con
una mano a Wilson y Fred Jackson cometió un fumble que sentenció las ambiciones
de la visita. La debacle de Seahawks fue tal que K.J. Wright fue expulsado por una acción violentísima contra Richard Rodgers.
Green Bay no le teme a ningún
rival y cuenta con equipos muy poderosos. Es hora de que los rivales se sientan
intimados por Aaron Rodgers y compañía. Su estructura ofensiva no se resintió a
pesar de la lesión de Jordy Nelson y los novatos Richard Rodgers (2014), Davante
Adams (2014) y Ty Montgomery (2015) están sumando recepciones, junto a los
experimentados Randall Cobb y James Jones.
La fuerza aérea luce intacta, la
defensiva se fortalece año a año y el juego terrestre ha crecido en las últimas
campañas con Eddie Lacy, aunque su lesión ante Seattle está alertando a la
franquicia. Packers es candidato natural en la Nacional aún con bajas sensibles
porque tiene recambio. Sin embargo, los playoffs resultan incómodos para Mike
McCarthy, quien deberá retorcer los fantasmas para generar miedo y no
arrastrarlos hacia adentro.
Líderes GB: A. Rodgers 25 de 33
pases (249 yardas, 2 TD / J. Starks 20 acarreos (95 yardas) / R. Cobb 8 recepciones
(116 yardas).
Líderes SEA: R. Wilson 19 de 30
pases (206 yardas), 2 TD / R. Wilson 10 acarreos (78 yardas) / D. Baldwin 7 recepciones
(92 yardas), 1 TD.