El predominio de New England Patriots parece eterno y no hay rivales que atenten
contra la potencia que han conformado Bill Bellichick y Tom Brady. La
suspensión que sufrirá el mariscal de campo de New England durante 4 juegos
podría emparejar la zona en el comienzo de la temporada. Sin embargo, los otros
equipos intentarán aprovechar esa baja momentánea y crecer a costas de
hipotéticas derrotas de Patriots con Jimmy Garoppolo. Nada de eso ocurrirá si
Bills, Dolphins y Jets repiten sus últimas campañas.
El más armado de los tres es New York Jets, que renovó con Ryan Fitzpatrick
como si fuera un jugador de etiqueta. La conclusión es que en Jets no había un
“plan B”. El mariscal cuenta con receptores de experiencia y sus lanzamientos
continuarán a manos de Eric Decker y Brandon Marshall. La llegada de Matt Forte
(RB, Bears) podría alimentar el juego terrestre hasta convertirlo en un factor
temible.
Respirándole en la nuca, aparece Miami Dolphins, un equipo que fue
acostumbrándose a sumar jugadores para luego desecharlos sin pena ni gloria. Esta
vez, llevaron a Mario Williams (Bills), Kiko Alonso (Eagles) y Byron Maxwell
(Eagles) para reforzar una defensa insegura y que perdió a Olivier Vernon; y al
corredor Arian Foster (Texans) en reemplazo de Lamar Miller (Texans). No
obstante, las miradas estarán puestas en Ryan Tannehill, que demostró en
cuentagotas su talento, aunque ya es tiempo de convertirse en el líder de la
ofensiva.
Por otra parte, ¿qué se puede esperar de Buffalo Bills? Cualquier resultado no
sorprenderá. Primero porque Rex Ryan acapara todo, en su perfil y en lo que
pretende de su plantilla. El perfil bajo no es su estilo y para colmo llevó a
su hermano Rob como coordinador defensivo. La fortaleza estará afuera del
entorno del joven Tyrod Taylor para que la presión no lo triture y pueda
desplegar sus condiciones. Así, el ataque se apuntalará con los corredores
LeSean McCoy y Reggie Bush (49ers). En definitiva, Ryan reestructuró a Bills con
una premisa de este deporte: correr y defenderse.
Finalmente, New England sabe que es el amo de esta división y en el mercado también hizo ruido, importándole muy poco la ausencia de Brady, ya que contrató a Martellus Bennett, otro ala cerrada de gran rendimiento en Chicago y que se acomodará al lado del gigante Rob Gronkowski. En la trinchera, arribó Chris Long (Rams) para cubrir la baja de Akiem Hicks (Bears), mientras que el backfield sigue siendo su punto débil.
Finalmente, New England sabe que es el amo de esta división y en el mercado también hizo ruido, importándole muy poco la ausencia de Brady, ya que contrató a Martellus Bennett, otro ala cerrada de gran rendimiento en Chicago y que se acomodará al lado del gigante Rob Gronkowski. En la trinchera, arribó Chris Long (Rams) para cubrir la baja de Akiem Hicks (Bears), mientras que el backfield sigue siendo su punto débil.